lunes, 1 de diciembre de 2008

inquietud

Mientras más cerca quiero estar, más lejos me sitúo, una barrera cada vez más gruesa separa tu perfecto rostro de mis anhelantes labios. Una mirada, una nota de tu risa hacen que mi alma se estremezca y eleve sus gritos hasta lo más alto. Sólo cuando te tengo cerca puedo sentir una sombra de felicidad y sólo cuando estoy lejos de ti mi ser se desintegra poco a poco sin dejar más que cenizas de lo que podría un día ser.
Al diablo con todo, al diablo con mis esperanzas. Solamente en otra vida te tendré y solamente en otro tiempo los mil obstáculos se desvanecerán. Al amanecer, las sábanas se hartan de mi cuerpo inmóvil cuya mente se haya en otro lugar mejor, irreal, donde solo la muerte nos podría separar.

Hacía mucho tiempo ya que no escribía nada. Espero volver a tener una cierta cantidad de entradas. No siempre hay ideas para expresar ni siempre hay motivos para hacerlo.